martes, 18 de agosto de 2015

Capítulo 45

29
Una Semana desde… 

En esta floja tarde de viernes, estoy tendida en mi cama, alternando entre  jugar  con el talismán de fútbol plástico  y  escribiendo  en  mi diario. Escribí:

No mejor amigo + no novio = no planes y no vida

Ninguno de mis padres ha mencionado mi ruptura con Federico excepto para decir que ellos todavía van a ayudarle a pasar por la universidad, y mamá seguirá tomando el viaje de compras con Vanessa porque ella no confía en Federico o su abuelo con tan importante responsabilidad.

¿Peter? Bueno, después de que le dejé la nota, varios regalos extraños comenzaron a aparecer, como un panda de felpa gigante sosteniendo  una bolsa de galletas de chispas de chocolate. Devoré las galletas en alrededor de dos minutos, pero ¿por qué demonios iba a darme un panda?

En represalia por el estúpido panda, llamé a Mery y Eugenia, y juntas, vestimos la cosa con ropa femenina y frotamos maquillaje sobre él. Luego escribimos el nombre de Peter sobre su pelaje blanco con lápiz de labios y lo pusimos frente a  la  escuela.  Bastante  defectuoso,  lo  sé,  pero  realmente  hizo  reír  a  Peter cuando lo vio. Yo lo espiaba desde una ventana.

Luego, la otra noche, la comida china fue entregada con una galleta de la suerte especial. Una con la fortuna escrita a mano y pegada en el plástico que decía:

“Lo siento, Espósito”. Así que traté de llamarlo y darle las gracias, pero no tomó su teléfono, por supuesto.

En respuesta, le envíe una pizza con un mensaje que decía: “Te perdono. Deja de ser un estúpido” en aceitunas. Aparentemente, mi mensaje apenas cabe en una ¡pizza extra grande! Hombre, Peter odia las aceitunas.

Luego, ayer, una baraja de cartas, una pareja de salero y pimentero, y un diario en blanco aparecieron en la puerta de mi dormitorio. Me encantan los nuevos diarios, el encuadernado de cuero y el papel huele de maravilla. Y hace que me sienta bien, que tal vez mi interés por la escritura no esté totalmente perdido, que pueda estar públicamente orgullosa de mi misma por otras cosas que el futbol.

Pero, ¿por qué no puede el chico sólo volverse loco hablándome? ¿Por qué toda la mierda encubierta?

Mi papá asoma la cabeza en mi dormitorio.

¿Puedo entrar?

Oculto mi diario bajo la almohada y tomo mi balón de futbol.

Seguro le respondo, sentándome.

¿Cómo sientes la rodilla?

No está mal.

Déjame   verte   extenderla      dice   papá,   levantando   mi   pie   derecho   y empujando y tirando de mi pierna, dentro y fuera varias veces   . Bien. Te estás recuperando muy bien.

Gracias.    

Dejo caer mi pie de regreso en la cama y comienzo a lanzar mi balón.

¿Qué estás haciendo este fin de semana?­­­ pregunta papá.

Sin planes.

¿Qué tal un pequeño viaje conmigo? No tengo juego el domingo.

¿A dónde vamos? ¿La playa? Dios, podría usar algo de calor y algo de aire fresco.

Papá se sienta en mi cama conmigo.

Estaba pensando en Michigan.

¿Michigan? digo, sacando mi lengua.  ¡Es más frío allí de lo que es aquí! ¿Por qué diablos iríamos allí?

Querías otras opciones, ¿verdad?

Si…

Mira, sé que no puedo detenerte de jugar fútbol en la universidad, pero si vas a jugar, quiero que vayas a algún lugar donde serás cuidada.

¿Cómo dónde?

Papá tomó una respiración profunda.

¿Quieres viajar hasta la Estatal de Michigan, conmigo? Su entrenador está interesado en ti. Él es un chico honesto, yo jugué contra él en la universidad.

Me reí fuertemente. Cuando dije opciones, me refería a Florida u Ole Miss o Tennessee, incluso.

¿Renunciar a Alabama por la Estatal de Michigan? ¿Estas burlándote de mí?

Lali… si vas a Alabama, sé que estarás haciendo grandes cosas como el programa de caridad con niños de acogida. No hay garantía de que alguna vez llegues al  campo, pero  hay  100  por  ciento  de  posibilidad de  que ellos te obliguen a hacer cosas como modelar para su calendario.

Asiento con la cabeza, presionando mi almohada.

¿La Estatal de Michigan realmente me dejaría jugar?

Tanto como te mantengas jugando como lo haces ahora, sí.    Papá sonríe   .
Ellos han visto algunos de tus videos.

¿Piensas que los chicos del equipo serán machistas?

Papá río.

Probablemente. Pero allí, con el tiempo conseguirás jugar. Y el entrenador me prometió que no desfilarás como un pedazo de carne.

Eso es bueno oírlo.

Papá desordena mi cabello.

Entonces, ¿qué dices? ¿Podemos ir a hablar con el entrenador de la Estatal de Michigan? ¿Talvez lanzar un balón con alguno de sus receptores abiertos?

Hagámoslo. ¿Cuándo nos vamos?

Podemos salir ahora. Empaca tus cosas. Trae algunos tacos.     Papá se puso de pie y caminó fuera de la puerta, pero entonces asomó su cabeza de nuevo   . Por cierto, llevaremos a Peter con nosotros. Él no lo sabe aún, pero vamos a detenernos en la Universidad de Michigan también. Le dije a su mamá que lo mantuviera en casa hasta que nosotros llegáramos allí.    Papá sonríe.

Dejo caer la maleta que saqué del armario   .  ¿Peter?    Dije, jadeando   .  No voy a ningún lugar con Peter.

Si… lo haces. Peter ha trabajado muy duro y tanto tiempo para entrar en Michigan, para retirarse ahora. Él merece esto. Y tú y yo vamos a apoyarlo.

Asiento de nuevo y aparto mis ojos, que están comenzando a lagrimar de nuevo.

Papá suspira.

¿Por qué Peter y tú no pueden funcionar a través de lo que sea que ha estado sucediendo desde septiembre?

Deberías hablar con él acerca de esto, papá. No conmigo. He estado lista para pasar a través de esto por semanas y semanas.

Papá regresa y cierra la puerta, y toma el balón de futbol, girándolo en sus manos.

¿Qué ha pasado exactamente?

¿Qué? ¿No lo sabes?

Nop.

¿Lo juras?

Lo juro.

Toco el talismán de futbol.

¿Sabías que a Peter le gustaba? ¿Cómo, uhm, más que una amiga?

Seguro. ¿Quién no?

Yo.

Bueno, todos pensamos que no estabas interesada.

Esta conversación con papá va a mucho mejor de lo que me podría haber imaginado. ¿Quién es este extraño imitador de Carlos Espósito?

Cuando me di cuenta de que a Peter le gustaba, y me gustaba, más que como un amigo, fui a verlo. Le dije que estaba para ello. Para intentar… tú sabes… ¿tener una relación?

Papá asintió.

Él dijo que no podíamos salir, pero que todavía seríamos amigos. Pero se puso raro de todas formas. Se puso loco por Federico y dijo algunas cosas malas. Él nunca se detuvo para pensar acerca de cuánto me dañaba.

¿Qué dijo acerca de Federico?

No podía decirle a papá de cómo Federico no quería que Peter y yo compartiéramos una cama, entonces digo:

Le dije a Peter que no podría hacer algunas cosas con él porque iba a salir con Federico. Luego él dijo toda esta mierda acerca de Federico tratando de controlar todo, y  que  yo  dejaba  a  todo  el  mundo  controlarme,  lo  cual  probablemente  es verdad, pero Peter sólo fue un idiota, papá.

Suena como si Peter estuviera celoso. Su orgullo fue herido. Entonces él actuó como un tonto. Cada chico lo hace de vez en cuando.

Lo entiendo. Pero he estado intentando  compensarlo, pero él incluso no devuelve mis llamadas.

Papá gira el balón de nuevo.

Entonces ¿Aún te gusta?

Me gustaba el viejo Peter. Apenas conozco este nuevo Peter.

Así, esto suena como si incluso, si tú fuiste a él y le dijiste lo mucho que le quieres, eso no importó, ¿verdad?

Correcto. Porque realmente lo intenté. ¿No apesta esto?

Papá sonríe.

Un hombre sabio dijo: “Nada sabe cómo la mantequilla de maní tanto como un amor no correspondido”.

¿Quién demonios dijo eso? ¿Gandhi?

Papá sonríe.

Charlie Brown.

Pensé que se suponía que los cómics serian divertidos.

Papá me tira el balón.

Una cosa que aprendí hace mucho tiempo es que incluso si piensas que estás destinado a estar con alguien, no necesariamente significa que conseguirás estar con ellos.

Suspirando, me río.

Estas  presionando  demasiado,  papá.     Pensando  en  mamá,  digo   : ¿Eso significa que tú, uhm, no te casaste con la persona que querías estar?

Por supuesto que me casé con la chica correcta. Sólo que tomó algo de tiempo llamar su atención. ¿Por qué infiernos una mujer como tu mamá estaría interesada en un idiota como yo?

Sonreí.

Allí esta eso.

Papá toma una foto de Peter y mía de la repisa, una fotografía tomada en el
Lago Lali cuando teníamos trece años. En la foto, estoy sonriendo a una trucha que acababa de capturar. Y Peter estaba sonriéndome.


Para  que  esto  valga  la  pena dice  papá,  pasando  sus  dedos  sobre  la imagen. Nunca he visto a nadie correr más rápido que Peter después de que tú te dañaras la rodilla la semana pasada.

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